La eliminación de tatuajes es un procedimiento que se realiza para tratar de eliminar un tatuaje no deseado.
La tinta del tatuaje está ubicada por debajo de la capa superior de la piel, eso hace que la eliminación del tatuaje sea más complicada. Si estás interesado en eliminar un tatuaje, deberás consultar con un Cirujano Plástico Certificado acerca de las opciones.
¿Por qué se realiza?
Si te arrepientes de un tatuaje, no estás conforme con su apariencia, se ha difuminado, vuelto borroso o consideras que no va con tu imagen personal actual, puedes considerar una eliminación de tatuajes.
La eliminación de tatuajes también puede ser importante si padeces una reacción alérgica al tatuaje u otras complicaciones, como una infección.
Por lo general, la eliminación de un tatuaje se hace como un procedimiento ambulatorio con anestesia local. Siendo la cirugía láser y la eliminación quirúrgica, las dos principales técnicas para borrarlos por completo.
Cirugía láser
Los láseres Q-switched, que liberan energía en un pulso único y potente, son el tratamiento elegido con mayor frecuencia para la eliminación de los tatuajes.
Antes del tratamiento con láser, se adormece la piel con una inyección de anestesia local. Luego, se aplica un potente pulso de energía en el tatuaje para calentar y desfragmentar la tinta del tatuaje. Los tatuajes multicolores podrían necesitar tratamiento con varios láseres y diferentes longitudes de onda.
Después de una sesión de eliminación de tatuajes con láser, puedes experimentar un poco de enrojecimiento, hinchazón y ampollas a medida que tu piel sana. Sin embargo, si notas signos de una infección, como aumento del enrojecimiento y dolor, hinchazón o pus, comunícate con tu Cirujano Plástico Certificado.
Extirpación quirúrgica
Durante la eliminación quirúrgica, se insensibiliza la piel con una inyección de anestesia local. El tatuaje se elimina con un bisturí y los bordes de la piel se unen con puntos. Después del procedimiento, el ungüento antibacteriano favorece la curación.
Cuidados para después de la eliminación del tatuaje
En este sentido, para cuidar la piel después de cada tratamiento, la doctora recomienda seguir los siguientes consejos.
- Lava el área tratada dos veces al día con agua y un limpiador suave.
- No debes exponerte al sol.
- Evita tocar la herida o cualquier descamación, ampollas o costras que se formen ya que puede causar una infección.
No intentes eliminar el tatuaje por tu cuenta. Las cremas para eliminar tatuajes del tipo «hágalo usted mismo» y otros tratamientos caseros no son eficaces y pueden causar irritación en la piel u otras reacciones.