La cirugía de brazos también llamada braquioplastia, dermolipectomia, lifting de brazos o lipectomía de brazos, es un procedimiento quirúrgico que:
- Retira el exceso de piel flácida que cuelga de los brazos.
- Elimina el exceso de depósitos de grasa de la parte posterior del brazo.
- Tensa la piel y mejora el contorno de los brazos.
La piel de esta área tiene varios problemas ya que es sumamente fina, tiene poca elasticidad y no es precisamente vulnerable al ejercicio. Por tanto, una alternativa disponible para corregir la flacidez de esta área es la braquioplastia, con la cual se restaura la forma del brazo.
Tipos de incisión
Esta cirugía tiene varias modalidades las cuales se diferencian de acuerdo al tipo de incisión que se realice. La selección del tipo de incisión dependerá de la cantidad del exceso de piel y grasa acumulada que tenga el paciente.
Hay que tomar en cuenta que el largo de la incisión es proporcional a la cantidad de piel suelta que haya. Es decir, mientras más piel suelta más larga será la incisión.
Tipo 1: Se realiza en pacientes con muy poca flacidez de la piel, pero con cierta acumulación de grasa. En estos casos se realiza una lipoescultura del área, a través de pequeñas incisiones, para eliminar depósitos de grasa y de esta forma reducir sutilmente el grueso del brazo. Este procedimiento es común en pacientes jóvenes.
Tipo 2: Se realiza en candidatos con piel suelta, la cual se elimina y recoge por medio de una incisión corta que se esconde debajo de la axila. Usualmente, también se realiza una lipoescultura para terminar de moldear el brazo.
Tipo 3: Se lleva a cabo en personas con casos más severos de piel suelta o flácida. Una incisión longitudinal se extiende desde la axila hasta el codo para eliminar el exceso de piel. Esta incisión se puede localizar en la parte interna o posterior del brazo. La localización se determina entre el médico y el paciente durante la evaluación preoperatoria.
Y ¿en qué consiste el procedimiento?
Primero se lleva a cabo una evaluación en donde el paciente asiste a consulta con un Cirujano Plástico Certificado para repasar los pormenores del procedimiento, la selección de la anestesia y aclarar sus dudas. Se habla del tipo de incisión y se establecen claramente las expectativas.
Durante el procedimiento se retira el exceso de piel usando una disección delicada para evitar lastimar los vasos y nervios del brazo.
En los casos que conllevan liposucción, pequeñas cánulas se utilizan para aspirar la grasa y en la mayoría de los casos se colocan drenajes para eliminar fluidos que se podrían acumular debajo de la piel. Los tejidos se cierran en capas con suturas delicadas y absorbibles.
- Duración: De 2 a 5 horas
- Anestesia: Se aplica anestesia general
- Los drenajes se retiran de uno a tres días después de la cirugía.
¿Cómo es la recuperación?
Después de la intervención el paciente deberá tomar en cuenta varios cuidados y precauciones para asegurar el éxito del resultado final. Es recomendable:
- Guardar reposo durante al menos 15 días, evitando cualquier tipo de actividad física por alrededor de 1 mes.
- Evitar cargar cosas con mucho peso.
- Dormir boca arriba.
- Tomar analgésicos para evitar posibles dolores o molestias.
- Usar una venda especial de compresión que ayudará a desinflamar la zona intervenida.
¿Cuáles son las posibles complicaciones de esta intervención?
Una de las complicaciones o efectos secundarios en este tipo de cirugía es la presencia de una cicatriz inestética y la probabilidad de que esta quede hipertrófica o queloidea.
Otro tipo de complicaciones comunes en este tipo de intervención son:
Posible infección: si el paciente nota fiebre o piel enrojecida debe consultar inmediatamente con su cirujano.
- Presencia de hematomas.
- Mala cicatrización.
- Casos graves de necrosis de tejido.